Las Cortes Generales de 1645 celebradas en la ciudad de València entre noviembre y diciembre de 1645 fueron las últimas del periodo foral. Felipe IV reunió los tres brazos que representaban el reino de Valencia para solicitarles ayuda militar en las campañas para la recuperación del Principado de Cataluña después de la rebelión de 1640 y su paso bajo soberanía francesa. La ayuda valenciana acabó confirmándose con un servicio de 1.200 hombres armados durante seis campañas para custodiar la ciudad de Tortosa, antemuralla del reino. Aun así, los brazos no desaprovecharon la ocasión para ampliar el régimen jurídico del reino, suplicando multitud de fueros y actas de corte. Entre otras iniciativas, se creó la Junta de Contrafueros, organismo encargado de velar por la observancia de las leyes valencianas y que estuvo activo desde entonces hasta 1707.
1.º volumen
Este primer volumen dedicado a las Cortes valencianas de 1645 incluye la edición del proceso transcrito por el escribano real, un extenso documento gracias al cual podemos seguir el curso de aquella asamblea desde la convocatoria hasta la clausura.