Alumnos de cinco colegios valencianos han ejercido esta mañana su derecho a la participación en el hemiciclo de Les Corts para celebrar el tradicional “Foro Infantil” organizado por UNICEF en el que se han planteado y debatido cuestiones relativas a la atención a los menores de edad.

En esta edición se ha tratado el derecho a la educación, derecho a un nivel de vida adecuado, derecho a la opinión, derecho al juego, y derecho a protección frente a los malos tratos.

Algunas de las opiniones planteadas por los estudiantes de los diferentes colegios son las siguientes: “la reflexión conduce al aprendizaje” y “la necesidad de tener acceso a la educación para ser capaces de tomar decisiones propias” porque “sin educación no hay futuro”. Asimismo, han destacado que el juego ayuda a desarrollar la “creatividad y la imaginación imprescindible para el desarrollo intelectual y emocional” y además “los niños deberían tener libertad para jugar ya que el juego fomenta la individualidad y personalidad y sobre todo cuando “un niño sabe resolver un problema jugando aprende a resolver problemas en la vida”. También han deseado que “ningún niño de cualquier país sufra” porque los niños “somos personas pequeñas, pero personas”.

Por último, la Presidenta de UNICEF, Bienvenida Guerrero, “ha dado una cálida enhorabuena” a los niños por sus palabras y ha agradecido a Les Corts su participación durante dieciséis años. Además, Guerrero ha destacado que es “deber de los adultos escuchar la voz de los niños”

El President de Les Corts ha agradecido a todos los niños `por asistir y por su intervenciones así como a padres y profesores por la participación y el esfuerzo realizados”. Por último Cotino ha dado las gracias a UNICEF por su “trabajo y perseverancia durante todos estos años”. A continuación se ha hecho entrega de los diplomas.

Con la organización de este Foro Infantil ya son 16 años los que UNICEF Comunidad Valenciana celebra con Les Corts Valencianes en una actividad que permite a los niños ejercer su derecho a la participación, entendido como un aprendizaje directo, a través del cual los niños pueden expresar sus opiniones, consensuar y tener una voz y una presencia equiparable a otros grupos sociales en todos los ámbitos que les afectan, incluidas las instituciones públicas.